lunes, 16 de septiembre de 2013

¿Educación? Nooo, por supuesto


JOSÉ LUIS Trasobares 14/09/2013

Que Aragón sea la comunidad donde salen más caros los comedores escolares y al mismo tiempo donde menos ayudas se concede a las familias para pagarlos es sin duda un gran éxito de la consejera Serrat y del Gobierno al que pertenece. Doña Dolores y su jefa, doña Rudi, podrán presumir cuando se junten con sus colegas en las cumbres peperas. Ellas baten récords. Cobrar 96 euros al mes por unos menús que en la mayor parte de los casos dejan mucho que desear y ceñir las becas a las unidades familiares cuyos ingresos no superen los 532 euros mensuales (pagas extra incluidas) requiere una elaboración muy trabajada, lo cual viene a desmentir esa actitud indolente que a veces, en mis desvaríos, atribuyo a la actual Administración autónoma aragonesa. Perdonen ustedes.
En un golpe de virtuosismo, la consejera de Educación está llevando el tema de los comedores y sus becas al terreno de la asistencia social. Genial. Como lo es abandonar la informatización de la escuela pública, dejar colgados a los interinos durante el verano (salvo a los de Religión, por supuesto) o transferir fondos a la concertada, que es el futuro. Causa pavor a los tiernos de corazón escuchar a Serrat cuando lanza sus discursos desafiantes, audaces, afilados como una guadaña. Pero... ¿acaso no late en ellos la justa ira de la señora por aquellas perfomances críticas que hicieron en la calle donde se ubica su sagrado domicilio? Se las pagarán: los de las camisetas verdes, los profesores díscolos, los padres de FAPAR, los hijos de familias pobres o medio pobres... Se han de acordar todos ellos de la calle Alfonso. Ya lo creo.
Pero no hay que dormirse en los laureles. El concurso de ideas para hundir la educación pública española está muy reñido. Sugiero a Serrat y Rudi que cuando comenten su faena en los comedores escolares la comparen con algún detalle paralelo como la reciente refinanciación de la sociedad Aramón (sesenta millones de euros en un nuevo crédito, más otros veinte o treinta que colean a su aire). Este detalle llenará de entusiasmo a sus correligionarios. Nos las van a coronar.

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